Formalizar los empleos informales
🏖️ Sábado por la mañana. Ibas a dedicarte a poner al día las cosas de la casa pero amaneciste afiebrado. Dolor de cabeza, garganta. Te cuesta levantarte. ¿Gripe? ¿Corona? El pasto de tu vereda está muy alto, y al portón de entrada le falta pintura hace rato. Protestás. Tocan el timbre. Un joven de linda sonrisa te dice que necesita trabajar, que puede cortarte el pasto y que es muy prolijo pintando. Estás a punto de contratarlo que pero te detenés. ¿Y si le pasara algo mientras trabaja? No hay ART. ¿Y si luego dice que trabajó siempre y te hace un juicio? No, gracias le decís. Y te sentís mal. Ahora te duele más la cabeza. El necesita trabajar y vos necesitás que te ayuden. ¿Tiene solución? Si, tiene.
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El caso australiano
Jorge Colina*
⭕ En la Argentina, el empleo asalariado registrado en empresas privadas ha pasado a ser la relación laboral minoritaria. De los 20 millones de ocupados que se estima hay en Argentina, sólo 6 millones (30%) es un asalariado registrado en empresa privada. El resto se conforma por empleo público (3 millones), cuentapropistas y trabajadoras de casas particulares con aportes en AFIP (3 millones) y los 8 millones restantes son asalariados no registrados (5 millones) y cuentapropistas sin aportes en AFIP (3 millones).
Gráfico 1. Composición del empleo en la Argentina
En millones de personas
Fuente: IDESA en base a Ministerio de Trabajo e INDEC
❗La raíz de esta enorme heterogeneidad en las relaciones laborales está en las diferencias de tamaño de los empleadores que contrasta con la unicidad que la legislación laboral aspira a darle al empleo asalariado. Un dato muy revelador en este sentido son las diferencias de tamaño de los empleadores según se trate de un asalariado registrado y un no registrado. El 67% de los asalariados registrados pertenecen a empresas con más de 40 trabajadores. Mientras que el 70% de los asalariados no registrados pertenecen a empresas con menos de 40 trabajadores. La cuña que separa a los empleadores que dan empleo asalariado formal (que son los más grandes) de los que dan empleo asalariado informal (que son los más chicos) es la legislación laboral que establece el mismo contrato de trabajo para cualquier tamaño de empleador.
😡 En otras palabras, regular una sola forma de vínculo laboral lleva a la situación en la que solo un segmento de los empleadores lo puede cumplir y el otro segmento no puede, entonces, apela al incumplimiento (informalidad).
🤔 ¿Por qué la informalidad es tan masiva?
Por dos razones.
➡️ La primera es la productividad económica. La formalidad tiene costos, por lo tanto, pueden pagarla las empresas cuya productividad es superior al costo de la for- malidad. Como la productividad está estrechamente asociada al tamaño, se observa que a mayor tamaño de empresa hay mayor formalidad laboral.
➡️ La segunda es la tipología del empleo. Los datos de la encuesta de hogares del INDEC señalan que el empleo informal tiene especificidades. Estas son: es preeminente entre los jóvenes, las mujeres segundas generadoras de ingreso de los hogares, los empleos part-time, los empleos de carácter eventual, las actividades con alta rotación laboral, las actividades con demanda muy fluctuante, los servicios personales (en contraposición a la manufactura y los servicios profesionales). Es decir, se trata de determinados tipos de empleos en donde la propia persona puede preferir la flexibilidad que otorga el vínculo no formal (jóvenes, muje- res segundas generadoras de ingresos) o la naturaleza del puesto requiere dicha flexibilidad (empleos part-time, eventuales, con alta rotación laboral, con demanda fluctuante, servicios personales).
El caso de los contratos casual en Australia
⭕ En Australia, a diferencia de Argentina, el mercado laboral es mucho más integrado. Allá hay 13 millones de ocupados de los cuales 11 millones, o sea, el 85% son asalariados registrados. Como referencia, este mismo porcentaje para la Argentina es de 45% (que serían los asalariados registrados en empresas privadas y los empleados públicos del Gráfico 1). En Australia sólo el 15% de los ocupados es un no asalariado.
🤔 La pregunta que cabe hacerse es: ¿No hay informalidad laboral en Australia?
No. Porque lo que hay es el “contrato casual”, que tiene como particularidad ser un con- trato formal pero con una vinculación donde no hay horarios prefijados, hay flexibilidad en la horas trabajadas, no hay licencias ni vacaciones pagas y no supone obligación de continui- dad de ninguna de las dos partes, por ello, no tiene indemnización por despido. Este tipo de contrato paga 25% más que el contrato laboral permanente. Así es como en la estructura del empleo asalariado registrado 8 de los 11 millones son contratos permanentes y 3 millones son contratos casuales (Gráfico 2).
Gráfico 2. Composición del empleo en Australia
En millones de personas
Fuente: IDESA en base a Australian Bureau of Statistics (ABS)
👩🏭👷♀️ Cuando se mira el perfil de los trabajadores y los empleos en el contrato casual aparece que se trata mayoritariamente de empleadores con menos de 40 trabajadores, jóvenes, muje- res part-time y actividades de alta rotación, con demanda fluctuante (hoteles y restaurantes, eventos culturales, artísticos y deportivos, pequeños comercios) y empleos de baja calificación. Es decir, las mismas características que los empleos informales de Argentina.
En otras palabras, en Australia no hay informalidad, pero es porque abren la alternativa legal de un contrato diferente al contrato permanente, el cual se ajusta mucho más a las necesidades y posibilidades de ciertas personas (jóvenes, mujeres part-time), empleadores (menos de 40 trabajadores) y empleos (alta rotación, demanda fluctuante, baja calificación) a los cuales el contrato laboral permanente no les encaja.
❗Como en Argentina no existe esta variante legal, entonces estos segmentos apelan al no registro laboral (informalidad). Se podría decir que, en Australia, si no hubiera contrato casual la informalidad tendería a ser de 23% que son los que hoy están en dicho contrato.
🔊 Consideraciones para la Argentina de la experiencia de Australia
Hay tres aspectos centrales que subyacen en la naturaleza del contrato casual australiano: a) el empleado no pone a disposición del empleador su fuerza de trabajo; b) el empleador no tiene el deber de dar ocupación efectiva; y c) no supone obligación de continuidad de ninguna de las partes.
☢️ Es por esto que no tiene horarios prefijados, hay flexibilidad de las horas trabajadas y no tiene indemnización por despido. Son empleos donde no hay subordinación económica ni funcional del empleado por lo que las condiciones son acordadas mutuamente y el empleado puede negarse a aceptar las tareas por el sólo hecho de no querer hacerlas, sin que esto implique necesariamente la disolución del vínculo.
💡 En el fondo, estas características del contrato casual australiano son muy propias del empleo no registrado en Argentina. El empleo no registrado tiene una muy alta rotación por las caracte- rísticas de la actividad, como ya se dijo, pero también porque el empleado muchas veces decide unilateralmente no realizar determinadas tareas que no son de su gusto o directamente no ir a trabajar más. El contrato casual australiano lo que hace es darle marco legal a este tipo de vínculo.
🤯 Para terminar, una de las derivaciones política y socialmente más traumáticas que desencadenó la masividad del empleo informal en Argentina es la multiplicación de los planes asistenciales (lo que eufemísticamente se llama los “planeros”). Es común escuchar iniciativas de salida de los “planes” hacia el empleo formal transformando los “planes” en subsidios al empleo. Hubo dos intentos concretos (Dec. 304/17 y Dec. 711/21) de convertir esta iniciativa en política pública y el fracaso de ambos fue rotundo.
❗ La principal causa del fracaso es que las personas que cobran los subsidios asistenciales, frecuentemente trabajan también en la informalidad. Esto significa que tienen posibilidades de conseguir empleos, en aquellos cuyas características sean asimilables a los empleos informales. El punto es que estos empleos no pueden ser formalizados con el contrato laboral permanente hoy vigente en la Argentina. Se necesita complementar el contrato laboral permanente con un contrato casual, como el comentado en este artículo, para poder formalizar estos tipos de empleos que hoy no pueden –por sus propias características– formalizarse. Sin un contrato de este tipo, esperar que algún día los “planes” se transformen en empleo formal es una ilusión. La experiencia de Australia con los contratos casual merece ser, por lo menos, reflexionada.
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*1. Jorge Colina: Economista, especialista en economía laboral, integrante Coconstructor de Plan País Argentina.
ℹ️ Fuente acá.
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