El campo representa el 60% de las exportaciones de Argentina.
Genera 3,7 millones de puestos de trabajo privados.
Y representa el 10% del PBI.
Prohibir las exportaciones de carne implica detener la cadena productiva agropecuaria.
No solo se ve afectada la producción de carne, sino de granos y forraje, el comercio (grande y pequeño) y la confianza en el cumplimiento de contratos argentinos.
O sea, cerrar las exportaciones no sólo es aislarnos del mundo, sino generar pérdida de empleos, cierre de comercios, incumplir contratos con países amigos y generar desconfianza.
Cerrar las exportaciones ocasiona la pérdida de cabezas de ganado, disminuye la oferta de carne y eleva los precios en nuestro país 
. Cerrar las exportaciones es, entonces, generar pobreza.
Aprovechemos la productividad de nuestro país, incentivemos su desarrollo.
¡Abrámonos al mundo para crecer! 
Pensemos en un #Plan.
¡Pensemos a color!
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Fuente: FADA
#YoQuierounPlanparaMiPais
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